Pilar Fiad: “Me angustia que no dimensionen lo que significa que ya estemos viendo las consecuencias de este oficialismo perverso”

4 de febrero de 2025

En la marcha federal LGBTIQNB+ antifascista y antiracista de Corrientes la coordinadora provincial de RAJAP leyó un texto, a fin de visibilizar la realidad de 140.000 personas que viven en Argentina con VIH. 

El pasado sábado casi un millón de personas se movilizó desde Casa de Gobierno hasta la playa Islas Malvinas II en la capital correntina, en el marco de la marcha federal LGBTIQNB+ antifascista y antiracista.

Las infundadas declaraciones del presidente de la Nación en el Foro Económico Mundial realizado en Davos, Suiza potenció movilizaciones en todo el país en repudio a sus dichos y además, por la aplicación de sus políticas que afectan a la población argentina.

En Corrientes la marcha estuvo coordinada por la Comisión Organizadora del la Marcha del Orgullo, que dispuso al finalizar el recorrido un micrófono abierto para presentes.

María Pilar Fiad integra la Red Argentina de Jóvenes y Adolescentes Positivos (RAJAP), una ​​Asociación Civil sin fines de lucro conformada por personas de entre 14 y 30 años que viven con VIH.

La Red tiene como objetivo dar apoyo, contención e información a sus integrantes. A la par, quienes son parte se organizan en núcleos a lo largo y ancho del país con el fin de poder empoderarse, lograr una mejor calidad de vida y hacer cumplir sus derechos.

En este sentido y como coordinadora de RAJAP en Corrientes, Pilar leyó unas palabras que escribió para la marcha y que se comparten a continuación.

“Buenas noches a todes. Quisiera empezar diciendo que estas palabras las he escrito para exteriorizar lo que está en mi mente todos los días, pero hoy por única vez quisiera compartirlas.

Hoy me encuentro aquí, marchando, no sólo como alguien que vive con VIH, sino como una persona que, como tantos otros, mira al futuro con miedo. Miedo a perder algo tan básico para mí como el acceso a mi medicación. Miedo de ver como la lucha que tanto ha costado, se ve amenazada.

Desde que asumió este Gobierno para sobrellevar mis preocupaciones uso más que nunca el humor. Disimulo el miedo que siento. Me río mucho e intento hacer reír para que no se note lo que realmente está en mi mente. 

Porque vivir con VIVIR y no poder saber cómo están tus defensas, si el mes siguiente me van a fraccionar la medicación hasta quitármela o acompañar a amigues en lo mismo, porque en esto sólos nunca. Es algo difícil de entender si no lo vivís. 

Mis tres pastillas al día son las que me mantienen sana y con vida. Todos todos días del año tomo la decisión de tomar mis antirretrovirales, sin importarme los efectos secundarios a corto y largo plazo. Todos los días elijo vivir. 

Pero todo ha cambiado después del repudiable discurso de nuestro presidente en Davos y aún más, al ver cómo estructura su campaña para las elecciones legislativas. Ahora me es imposible ocultar mis miedos. 

No puedo, ni podemos seguir minimizando una de las tantas cosas que está en juego: la calidad de vida de 140.000 argentinos que vivimos con este virus sin cura. No logro pensar en el futuro, porque mi futuro depende de mi medicación. Sin ella no tengo futuro, así, sin vueltas. 

Siempre repito e insisto, soy una mujer cis, soy blanca, delgada, en aparecencia al menos, heteronormada y tengo un plato de comida todos los días. Si yo, con todos estos privilegios me siento así, ¿qué queda para quienes viven aún más expuestos a la violencia de este sistema? Escondidos, marginados y estigmatizados.

He despedido a tantas personas que vivían con VIH, jóvenes de mi edad la mayoría, que me he amigado con la muerte. Soy insensible a ella y no me angustia mi muerte. Más me angustia que si la situación empeora me resienta con mi familia por ejemplo, que ha votado y apoya a Milei. 

He acompañado a varios en el camino del SIDA, a amigos y a desconocidos, he visto a muchos salvarse pero a muchos más morir. No quiero que mi familia tenga que acompañarme a mí en ese camino, no quiero llegar a eso. 

Me angustia que no dimensionen lo que significa que ya estemos viendo las consecuencias de este oficialismo perverso. Faltan antirretrovirales, faltan reactivos y hasta leche de fórmula para les bebés con mamás positivas.  

Estas políticas de salud, tanto públicas como privadas, que estamos sufriendo terminan en falta de medicamentos. Y sin medicación morimos, así, sin vueltas. 

Si bien la provincia intenta hacerse cargo de los faltantes, no es suficiente. Mientras tanto hace unos días se despidió al 40% de la Dirección de VIH, Hepatitis Virales, ITS y Tuberculosis. 

Mantener sanos a los 140.000 argentinos que vivimos con VIH es más económico para el Estado que dejarnos enfermar. Mantener el presupuesto 2023 en políticas relacionadas al VIH e ITS, no tiene otro fundamento más que uno: el odio. 

Voy a ir finalizando con algo un poco polémico, alarmista y crudo. Estas políticas de desmantelamiento nos van a llevar de nuevo a una epidemia, a la muerte de enfermos crónicos, quienes Milei cree que sólo somos un gasto para la salud pública. 

El VIH ni ninguna enfermedad, a diferencia de Milei, no discriminan. No les importa a quien amas, tu etnia ni tu género.

Mi vista del futuro ha cambiado, ya no puedo ni pensar en ser mamá por ejemplo, con todos estos retrocesos en salud y materia de derechos, tanto públicos como privados. No hay garantías de que mis hijes nazcan sin vih. Ni los míos ni los de nadie VIH+. 

¿Otro derecho que nos van a arrebatar? ¿Otro retroceso que nos imponen? No lo permitamos. No nos resignemos. No demos ni un paso atrás. Aquí nadie está sola, solo ni solx.”

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Las Lisas, prensa feminista y con perspectiva de género, expresa públicamente la total adhiesión a cada de unas de María Pilar Fiad.